El cuento hace alusión a un personaje llamado "orejas de cartón", mote atribuido por haber nacido con las orejas delgadas y muy pegadas al cuello. A medida que fue creciendo se tornó en una persona solitaria que se la pasaba todo el tiempo durmiendo, era un completo haragán que comía poco y tenía una contextura escuálida.
Vestía pantalones extravagantes que se le escurrían porque no se ajustaba bien el cinturón dejando ver sus interiores No tenía aspiraciones en la vida, había llegado a la mayoría de edad, sin terminar sus estudios secundarios y no se esforzaba por conseguir trabajo.
De extracción muy humilde y su familia escasamente conseguía dinero para comer, había días que pasaban sin probar alimento.
Su padre era un hombre rudo, ordinario y grosero, que golpeaba a las hijas y a la mujer por cualquier cosa que le disgustara. En ese ambiente creció orejas de cartón.
El cuento está basado en un caso real de violencia intrafamiliar